Centro Histórico de Los Silos

Resguardado bajo la montaña de Aregume encontrarás este encantador y tranquilo centro histórico. El municipio, situado en un enclave privilegiado, tiene dentro de sus fronteras un inmenso y genuino legado de biodiversidad.

Cuando te adentres en su casco histórico llamará tu atención la Plaza de la Luz y sus coloridos jardines. Acogedora como pocas, te invita a sentarte a disfrutar de las refrescantes sombras y contemplar como la plaza se ha convertido en todo un símbolo histórico y popular. Haz una visita a la reluciente Iglesia Nuestra Señora de la Luz, del siglo XVI, y que, según cuenta la leyenda, guarda una preciosa imagen de la Virgen de La Luz, que fue encontrada en la costa por un pescador portugués. En la segunda mitad del siglo XVIII se construyó el Camarín de la Virgen que se ubica sobre un trono de principios de siglo, pieza única en Canarias mediante el que se eleva la imagen.

Adéntrate en el Antiguo convento de San Sebastián de Monjas Bernardas que ha sido declarado Monumento Histórico-artístico. En la actualidad está totalmente restaurado tras algunos infortunados intentos de derribo. El edificio acoge en su interior la Biblioteca Pública, una cuidada sala de exposiciones y el Centro de Visitantes donde podrán facilitarte toda la información del municipio. También puedes visitar la pequeña Ermita del Calvario, que pese a lo reducido de su tamaño guarda un aire solemne que invita a pasar y conocer su interior.

Reconocerás el edificio del Ayuntamiento de Los Silos por las banderas que ondean en lo alto y por los múltiples elementos arquitectónicos acordes con la más fiel tradición de las construcciones autóctonas. En su arquitectura destacan los ventanales de guillotina y de dos hojas con ventanillos levadizos, los aleros salientes y la carpintería de cojinetes con utilización de tea. Aunque ahora alberga la casa consistorial, a esta edificación se le conoce desde siempre con el nombre de Casa de los Trujillos.

Recorre las calles adoquinadas de Los Silos escuchando el traqueteo de tus pasos y siéntete parte de toda esta historia que parece haberse detenido en el tiempo sin querer avanzar.